En un evento que contó con la presencia de gran número de servidores públicos especialistas, investigadores y público en general, la Secretaría Nacional de la Juventud (Senaju) junto a la Dirección General de Asuntos Criminológicos del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (Minjusdh), el Observatorio Nacional de Política Criminal (Indaga) y el Programa Nacional de Centros Juveniles (Pronacej) realizaron el simposio híbrido interdisciplinario: Volver a Empezar: experiencias de reinserción de jóvenes egresados de Centros Juveniles.
El objetivo del simposio ha sido presentar y construir un espacio de diálogo entre especialistas sobre los principales hallazgos de la investigación y sensibilizar al público objetivo sobre la situación de los(as) jóvenes egresados de centros juveniles.
“Desde la Senaju consideramos que es clave atender a esta población joven, según la Política Nacional de Juventud, al 2030 queremos lograr que 8 de cada 10 jóvenes alcancen su desarrollo integral. La idea es poder reducir estar brechas que actualmente existen, las investigaciones que realizamos es el primer paso para acercar las políticas públicas a esta población y generar mayores oportunidades y mejorar su calidad de vida”, señaló la directora de Investigación y Desarrollo, de la Senaju, Rosemary Fernández Rodríguez.
Por su parte, la directora general (e) de Asuntos Criminológicos, del Minjusdh, Karina Chávarry, señaló que los procesos que afrontaron los jóvenes para reinsertarse han sido ejemplares: “¨¿Cómo superaron las adversidades, cómo se reconstruyeron después de cometer faltas y cómo desarrollaron una nueva perspectiva evitando caer nuevamente en la delincuencia? Aspiramos a crear condiciones propias para que los jóvenes no reincidan y que siempre contribuyan de manera significativa a la sociedad”.
“Volver a empezar: Experiencias de reinserción de jóvenes de centros juveniles”
Es una investigación que recoge 22 historias de jóvenes de La Libertad, Cusco, Lambayeque, Tacna, Puno y Lima, quienes en su adolescencia infringieron la ley, cumpliendo así la medida judicial de internamiento en un centro juvenil y que en la actualidad están reinsertados de manera exitosa en la sociedad.
Conoce el testimonio de Ana: “Fui persuadida por el señor donde trabaja para cometer el delito. Yo estaba trabajando en su librería para ahorrar y poder estudiar, pero esa tienda solo era fachada. Participé incitada por este señor y me sentenciaron por secuestro cuando tenía 16 años, siempre quise salirme, pero tenía miedo por las represalias, estar en Santa Margarita fue muy difícil para mí, no hablaba con nadie durante un año. A los 19 años del lugar, mi familia me ayudó a prepararme e ingresar a la universidad, ahora estoy en quinto ciclo de la carrera de Gestión Pública en la Universidad Nacional de Juliaca”.
Nino, un joven de Pucallpa que cometió delitos y que hoy está reinsertado en la sociedad: “Soy de Pucallpa, pero nos mudamos a Lima porque mi mamá tenía muchos problemas con mi papá. En el colegio, no me dedicaba mucho, pero siempre dibujaba, cuando estaba en la secundaria, empecé a robar junto con mi hermano mayor. Ingresé al CDJR por robo y me ponía a los talleres para distraerme, pero no sabía cómo aprovecharlo. Cuando salí del lugar me puse a trabajar, pero me pagaban muy poco. Volví a cometer delito y estuve preso en Sarita Colonia por 4 años y mi hermano también estuvo preso. En la prisión seguía dibujando y aprendí a tatuar. Salí de prisión y me contactaron por mis dibujos, me hice conocido. He viajado a Lima, provincias y hasta me llamaron para ir al extranjero. Me siento orgulloso de mi progreso, esto no hubiera sido posible sin el arte y la ayuda de la gente que confió en mi talento”.
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